jueves, 7 de febrero de 2013
Policía Nacional española respalda versión oficial sobre explosión en Pemex
Alejandro Gutiérrez
Madrid, (proceso.com.mx).- La Policía Nacional española confirmó hoy aquí que las primeras conclusiones de sus expertos sobre el terreno en la explosión en la sede corporativa de PEMEX apuntan a que se debió a “acumulación de gas” y descartó “en primera instancia la existencia de explosivos convencionales”.
A través de un comunicado de prensa, la policía dio a conocer que colaboran con las autoridades mexicanas en esta investigación, con la presencia de dos especialistas en explosivos del grupo TEDAX-NRBQ, al lado de especialistas de la estadounidense ATF y la inglesa SGS.
Explicó que los análisis de las muestras recogidas en el lugar de los hechos, los informes forenses sobre las víctimas y el escombro de la aportarán información clave para “confirmar la hipótesis inicial”.
Las autoridades mexicanas, dice, solicitaron la colaboración de la Policía Nacional española, tras la fuerte explosión registrada el 31 de enero, que causó 37 muertos y más de un centenar de heridos en la sede corporativa de Petróleos Mexicanos.
Dos especialistas del TEDAX-MRBQ (Técnicos en Desactivación de Artefactos Explosivos-Nuclear, Radiológico, Bacteriológico y Químico) se desplazaron a México y comprobaron en el lugar los efectos de la explosión en la Torre B del complejo de PEMEX.
En las inspecciones, los técnicos españoles estuvieron acompañados del Procurador General de la República, Jesús Murillo Karma, y del secretario general del Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen), Eugenio Imaz.
Entre las acciones para averiguar las causas del siniestro, los especialistas españoles han recorrido durante varios días las instalaciones, observando los daños causados por la explosión tanto en el edificio como en la zona aledaña a la torre.
Han tenido acceso a los conductos de gas, electricidad y agua que suministran el edificio siniestrado, así como informes y fotografías.
El amplio comunicado informa que “las primeras conclusiones, aunque no definitivas, parecen excluir la existencia de explosivos convencionales que pudieran atribuir el hecho a un atentado”.
La hipótesis más factible podría ser la explosión producto de la acumulación de gas en el sótano o segundo sótano del edificio, donde murieron tres trabajadores de mantenimiento. Esto podría haber provocado el derrumbe del techo.
No obstante, precisa, se esperan los correspondientes análisis de muestras recogidas en el lugar de los hechos, informe forense sobre las victimas, así como que concluya el desescombro de la zona del foco, “con el objeto de determinas si existe algún resto de explosivo”.
Fuente Proceso
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