Toluca, Méx., 14 de enero. El
valle de Toluca vivió este lunes una de las jornadas más cruentas de
los últimos años, con un total de 15 muertes violentas. Durante la
mañana, en tres hechos distintos, fueron hallados 13 cadáveres, la
mayoría descuartizados y embolsados; por la tarde, dos hombres fueron
ultimados a balazos, uno en Lerma y otro en Joquicingo.
Pasaron más de 10 horas para que las autoridades de la entidad
emitieran una versión oficial de los hechos, aunque la Procuraduría
General de Justicia del Estado de México (PGJEM) sólo se concentró en
dos asuntos: el hallazgo de cinco cuerpos en Toluca y otros seis
descuartizados en Zinacantepec; no informó sobre unos cadáveres
encontrados en Tianguistenco y el asesinado en Lerma.En todos los casos hay indicios de que tuvieron participación integrantes de bandas del crimen organizado, que en Zinacantepec y Tianguistenco dejaron mensajes intimidatorios dirigidos a los mandos de la policía estatal.
La jornada fatídica comenzó casi a las 4 de la madrugada, cuando vecinos de la colonia Ocho Cedros, una de la más violentas de la capital del estado, reportaron el hallazgo de cinco cadáveres en la calle Lanceros, muy cerca de la intesección con avenida del Pacífico.
Policías encontraron un cuerpo degollado, tres desmembrados y dos ejecutados, todos dentro de bolsas de plástico negras. Los dos cadáveres que tenían impactos de arma de fuego también presentaban huellas de tortura.
En Tianguistenco
Más tarde, corporaciones de seguridad locales recibieron
el reporte del hallazgo de dos cadáveres en Santiago Tianguistenco, 20
kilómetros al oriente de Toluca. Los cuerpos se encontraban dentro de
una camioneta estacionada fuera de una tienda de conveniencia. Uno de
los occisos fue degollado.
Alrededor de las 7:30 horas, la policía local recibió el reporte de
que de un auto Jetta con placas del Distrito Federal, estacionado en la
calle 3 de Mayo del barrio de la Veracruz, en el municipio de
Zinacantepec, aledaño a Toluca, provenía un olor fétido.Los efectivos abrieron el auto y encontraron siete bolsas negras con restos humanos, cuatro en los asientos y tres en la cajuela. En un principio se desconocía con exactitud el número de personas muertas, pero una vez que la PGJEM realizó pruebas periciales se informó que los restos corresponden a seis personas.
Entre los occisos se encuentra el propietario de un lote de autos de Zinacantepec, de donde el sábado un comando robó ocho vehículos, entre ellos el Jetta negro donde se encontraron los cuerpos.
Finalmente, alrededor de las 9 horas policías de Lerma confirmaron que un hombre falleció tras haber recibido cuatro tiros en el centro de esa localidad. La policía presume que pudo ser un ajuste de cuentas. La cruenta jornada cerró con el asesinato de otro varón en Joquicingo.
Fuente La Jornada
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