García Luna sobrevivió chantajeando a dos presidentes, Vicente Fox y Felipe Calderón. Y a pesar de que Reporte Indigo y otros medios documentamos sus excesos y corruptelas, siempre fue el intocable de Calderón.
Los diputados le extendieron ayer su acta de
defunción a la Secretaría de Seguridad Pública. Fueron exequias tardías.
El cadáver apestaba desde que arrancó el sexenio.
Nada bueno puede construirse cuando se concibe desde el torcido cerebro de un personaje que pasará entre lo más oscuro para la historia moderna de la política mexicana.
Genaro García Luna se perpetuó durante tres sexenios como jefe de la inteligencia en el Cisen y como el creador de dos entelequias de seguridad mejor conocidas como la Agencia Federal de Investigaciones (AFI) y la Secretaría de Seguridad Pública (SSP).
Sobrevivió chantajeando a dos presidentes, Vicente Fox y Felipe Calderón. Y a pesar de que Reporte Indigo y otros medios documentamos sus excesos y corruptelas, siempre fue el intocable de Calderón.
Nadie entendíamos, dentro de la lógica común, cómo García Luna terminó pasando por encima de secretarios de Defensa y de Marina, de Procuradores, de asesores presidenciales en seguridad, de diplomáticos, de gobernadores, en fin. Nadie le puso un alto.
Hasta que SU BURDO complot de Tres Marías lo desenmascaró incluso con quienes decía que eran sus protectores, los norteamericanos. Conocieron el verdadero monstruo al que siempre ignoraron o utilizaron.
Por eso es digna de tomarse en cuenta la declaración que al diario La Jornada le hizo el jueves Mayolo Medina, un legendario y reconocido funcionario de seguridad y de Gobernación.
“En toda mi experiencia como servidor público, jamás había visto una predilección de tal magnitud” como la del presidente Calderón por García Luna, quien termina su gestión “confundido y confundiendo los elementos del SNSP; quiso mostrar fuerza y coraje, pero sin sabiduría”
Mayolo Medina advirtió que la SSP fue errática, un fracaso y estuvo plagada de caprichos personales…..”Nuestro país navega sin rumbo fijo. Vivimos un escenario de confusiones institucionales, conceptuales y estratégicas”.
La sepultura tardía que ayer se le dio a la Secretaría de Seguridad Pública confirma esa visión.
Calderón tenía la mejor voluntad de combatir el crimen organizado, pero falló en tres factores clave.
Uno, su elección del hombre, al que apadrinó Carlos Slim en su ambición por adueñarse de ese negocio de la inteligencia nacional que hoy es su Plataforma México.
Dos, su terquedad de sostener a toda costa a quien, conforme avanzaba el sexenio, le demostraba que al frente de la seguridad nacional no debía estar el policía que investigó la nunca resuelta fuga de “El Chapo”.
Tres, su obcecación por insistir en una estrategia a la que se le inyectaban miles de millones del presupuesto para terminar cosechando más sangre, más violencia, más muertos.
Diecinueve estados mexicanos están en la lista de veda para los turistas norteamericanos. La violencia, digan lo que digan, ahuyentó inversiones. Y la tranquilidad de toda una nación, sigue secuestrada.
Dirán en su defensa que capturaron o mataron a cientos de capos, lugartenientes y sicarios. Pero lo que no reconocerán es que terminaron de consumar –por incompetencia o por complicidad– el monopolio de la droga a favor de un solo cártel.
Que sepamos hasta ahora, el consumo de la droga no disminuye en los Estados Unidos. Más aún, se legaliza y crecerá. ¿A Pemex, Telmex y CFE le vamos sumando Cocamex?
Por eso cuando se escriba el epitafio de este malogrado sexenio, su guerra contra el crimen organizado y el nombre de Genaro García Luna serán su más pesada lápida.
Otro México habría sido el que entregaría el primero de diciembre quien se negó a ver lo que era evidente para todos: que el primer secuestrado llevó por nombre Felipe y como apellido, Calderón.
Fuente Reporte Indigo http://www.reporteindigo.com/reporte/mexico/garcia-luna-secuestrador
Nada bueno puede construirse cuando se concibe desde el torcido cerebro de un personaje que pasará entre lo más oscuro para la historia moderna de la política mexicana.
Genaro García Luna se perpetuó durante tres sexenios como jefe de la inteligencia en el Cisen y como el creador de dos entelequias de seguridad mejor conocidas como la Agencia Federal de Investigaciones (AFI) y la Secretaría de Seguridad Pública (SSP).
Sobrevivió chantajeando a dos presidentes, Vicente Fox y Felipe Calderón. Y a pesar de que Reporte Indigo y otros medios documentamos sus excesos y corruptelas, siempre fue el intocable de Calderón.
Nadie entendíamos, dentro de la lógica común, cómo García Luna terminó pasando por encima de secretarios de Defensa y de Marina, de Procuradores, de asesores presidenciales en seguridad, de diplomáticos, de gobernadores, en fin. Nadie le puso un alto.
Hasta que SU BURDO complot de Tres Marías lo desenmascaró incluso con quienes decía que eran sus protectores, los norteamericanos. Conocieron el verdadero monstruo al que siempre ignoraron o utilizaron.
Por eso es digna de tomarse en cuenta la declaración que al diario La Jornada le hizo el jueves Mayolo Medina, un legendario y reconocido funcionario de seguridad y de Gobernación.
“En toda mi experiencia como servidor público, jamás había visto una predilección de tal magnitud” como la del presidente Calderón por García Luna, quien termina su gestión “confundido y confundiendo los elementos del SNSP; quiso mostrar fuerza y coraje, pero sin sabiduría”
Mayolo Medina advirtió que la SSP fue errática, un fracaso y estuvo plagada de caprichos personales…..”Nuestro país navega sin rumbo fijo. Vivimos un escenario de confusiones institucionales, conceptuales y estratégicas”.
La sepultura tardía que ayer se le dio a la Secretaría de Seguridad Pública confirma esa visión.
Calderón tenía la mejor voluntad de combatir el crimen organizado, pero falló en tres factores clave.
Uno, su elección del hombre, al que apadrinó Carlos Slim en su ambición por adueñarse de ese negocio de la inteligencia nacional que hoy es su Plataforma México.
Dos, su terquedad de sostener a toda costa a quien, conforme avanzaba el sexenio, le demostraba que al frente de la seguridad nacional no debía estar el policía que investigó la nunca resuelta fuga de “El Chapo”.
Tres, su obcecación por insistir en una estrategia a la que se le inyectaban miles de millones del presupuesto para terminar cosechando más sangre, más violencia, más muertos.
Diecinueve estados mexicanos están en la lista de veda para los turistas norteamericanos. La violencia, digan lo que digan, ahuyentó inversiones. Y la tranquilidad de toda una nación, sigue secuestrada.
Dirán en su defensa que capturaron o mataron a cientos de capos, lugartenientes y sicarios. Pero lo que no reconocerán es que terminaron de consumar –por incompetencia o por complicidad– el monopolio de la droga a favor de un solo cártel.
Que sepamos hasta ahora, el consumo de la droga no disminuye en los Estados Unidos. Más aún, se legaliza y crecerá. ¿A Pemex, Telmex y CFE le vamos sumando Cocamex?
Por eso cuando se escriba el epitafio de este malogrado sexenio, su guerra contra el crimen organizado y el nombre de Genaro García Luna serán su más pesada lápida.
Otro México habría sido el que entregaría el primero de diciembre quien se negó a ver lo que era evidente para todos: que el primer secuestrado llevó por nombre Felipe y como apellido, Calderón.
Fuente Reporte Indigo http://www.reporteindigo.com/reporte/mexico/garcia-luna-secuestrador
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Puedes dejar tus comentarios en cualquier momento, solo trata de poner buenos argumentos y sobre todo trata de evitar el uso de palabras altisonantes, este blog es de ustedes.
Saludos.