Susana González G.
Apenas comenzó 2013, el precio promedio de la
tortilla en los supermercados subió a más de 10 pesos por kilo, con lo
que se redujo la diferencia que mantenía respecto de los expendios
tradicionales, de más de 3 pesos, a sólo 2.30.
En sólo tres días, del lunes 31 de diciembre al miércoles 2 de enero,
el alimento subió 0.12 centavos en los supermercados, al pasar de 9.92
pesos a 10.04. En contraste, en las tortillerías tradicionales el
aumento únicamente fue de 0.03 centavos en el mismo lapso, al subir de
12.31 a 12.34 pesos, indican los monitoreos del Sistema de Información e Integración de Mercados (SNIIM) de la Secretaría de Economía (SE).Más allá del costo promedio, los datos oficiales muestran que se está generalizando el precio de más de 10 pesos por kilo en los supermercados del país, ya que así se reporta en 35 de las 52 ciudades vigiladas por el organismo. Destacan además los casos de Xalapa, Villahermosa y Hermosillo, donde el precio es superior a 11 pesos en lo supermercados, más caro que el de tortillerías de otras ciudades, como León, Puebla y Tlaxcala, así como la zona metropolitana de la ciudad de México.
Si bien el encarecimiento de la tortilla en los últimos años ha sido de unos cuantos centavos, el monitoreo indica que ha sido más elevado o frecuente en los supermercados, a grado tal que ha propiciado que ya no sea tan grande la brecha que guardaba respecto del precio de venta de los expendios tradicionales.
Así, a la fecha, la diferencia entre el precio promedio entre ambos tipos de establecimientos es de 2.30 pesos, en contraste con los 3.12 registrados hace exactamente un año, en enero de 2012, y con los 3.58 correspondientes a enero de 2009, el máximo registrado en el pasado sexenio.
En términos porcentuales implica que el precio de la tortilla en los supermercados resulta actualmente 22.9 por ciento más barato que el de las tortillerías, pero hace cuatro años la brecha era de 63.5 por ciento entre ambos lugares.
Luego de que en 2007, al comenzar el sexenio de Felipe
Calderón, se desató la crisis de la tortilla, el gobierno federal logró
que las tiendas de autoservicio y los supermercados comercializaran el
alimento a un precio mucho más barato que en las tortillerías
tradicionales, a pesar de que su proceso de fabricación es distinto, ya
que utilizan harina de maíz y no el tradicional maíz nixtamalizado que
usan estas últimas.
De cualquier manera, el SNIIM muestra que durante los últimos años la diferencia de precio entre ambos negocios osciló alrededor de los 3 pesos en los primeros días de enero, pero 2013 ya marcó la excepción al respecto.
Así, al comenzar 2007 la tortilla se vendía a 8.76 pesos en promedio en las tortillerías y a 5.73 pesos en supermercados, es decir, una diferencia de 3.03 pesos. Un año después la disparidad fue de 2.92 pesos, subió a 3.58 en 2009, se ubicó en 3.21 en 2010, quedó en 2.84 en 2011 y en los ya mencionados 3.13 en 2012 , pero ahora la diferencia es de sólo 2.30.
Sin embargo, el titular de la Secretaría de Economía, Ildefonso Guajardo, aseguró que las condiciones de empiezo de este año son más favorables que las del pasado, además de que no esperan un alza a corto plazo en los precios.
De cualquier manera, el SNIIM muestra que durante los últimos años la diferencia de precio entre ambos negocios osciló alrededor de los 3 pesos en los primeros días de enero, pero 2013 ya marcó la excepción al respecto.
Así, al comenzar 2007 la tortilla se vendía a 8.76 pesos en promedio en las tortillerías y a 5.73 pesos en supermercados, es decir, una diferencia de 3.03 pesos. Un año después la disparidad fue de 2.92 pesos, subió a 3.58 en 2009, se ubicó en 3.21 en 2010, quedó en 2.84 en 2011 y en los ya mencionados 3.13 en 2012 , pero ahora la diferencia es de sólo 2.30.
Sin embargo, el titular de la Secretaría de Economía, Ildefonso Guajardo, aseguró que las condiciones de empiezo de este año son más favorables que las del pasado, además de que no esperan un alza a corto plazo en los precios.
Por ello, en uno de los productos más importantes, que es la tortilla, no esperamos presiones en absoluto; en el caso del huevo estamos analizando el comportamiento del mercado y estamos observando que en el punto de vista cíclico se pueden esperar bajas importantes en el precio del kilogramo de huevo hacia el mes de febrero.
Fuente la Jornada
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