MÉXICO, D.F. (proceso.com.mx).- Menos de 24 horas después de que Enrique Peña Nieto recibió en reunión privada al boxeador Saúl Canelo Álvarez, el juez Séptimo de lo Penal en Jalisco negó la orden de aprehensión que en su contra solicitó la Fiscalía General.
El juez Alejandro Guevara Pedroza llamó al límite el plazo que tenía para resolver la petición de la Agencia número 2 de Hechos de Sangre de la Fiscalía General de Jalisco, que el pasado 16 de abril consignó la averiguación previa 15729/2011 en la que solicitó orden de aprehensión en contra Saúl Álvarez por el presunto delito de lesiones contra el boxeador Ulises Archi Solís, así como contra su hermano Juan Ramón Álvarez Barragán por el delito de falsedad en declaraciones ante una autoridad ministerial.
Lo anterior debido a la denuncia que en octubre de 2011 presentó Solís, quien acusa a Álvarez de haberlo golpeado, lo que le ocasionó una triple fractura en la mandíbula que hasta ahora lo ha mantenido alejado de los encordados y sin poder cumplir los contratos que tenía firmados con su promotora.
Mientras Emilio González fue gobernador de Jalisco, el caso del Archie Solís estuvo estancando. Con Aristóteles Sandoval al frente del Ejecutivo, finalmente la Fiscalía consignó ante el juez la averiguación previa donde se solicitó la orden de aprehensión que Guevara Pedroza negó con el argumento de que los testigos aportados por Solís “fueron manipulados”.
En la reunión privada con Peña Nieto, también estuvo presente Juan Ramón Álvarez, el hermano indiciado.
Fuente Proceso
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