Diputado del PRD pide que bodas gay se celebren “en lo oscurito”

Pedro Zamora Briseño

COLIMA, Col. (apro).- Rafael Mendoza Godínez, diputado local perredista, pidió al ayuntamiento de Cuauhtémoc no realizar más bodas gay en espacios abiertos, con el argumento de que la población “no está preparada todavía para eso, mucho menos para verlo en público”.
A través de un documento enviado a la presidenta municipal, Indira Vizcaíno Silva —su compañera de partido—, el legislador cuestionó el hecho de que recientemente la oficial del Registro Civil Martha Zepeda del Toro celebró el matrimonio de dos hombres en el quiosco del jardín principal.
Expuso: “Madres de familia me han externado su preocupación de que en este espacio público se lleven a cabo bodas entre personas del mismo sexo, porque consideran que alteran la concepción que los niños y las niñas tienen en relación con la pareja que forman sus padres”.

Sin el propósito de “entrar a discusión sobre el amparo legal que existe para garantizar todos los derechos para todas las personas”, Mendoza Godínez realizó a la alcaldesa “un respetuoso exhorto para que analice la posibilidad de que tales actos (las bodas gay) se verifiquen en el espacio emblemático y natural que representa la legalidad y la vida institucional republicana, como es la oficina del Registro Civil”.
Cuestionado por los reporteros durante la conferencia de prensa en la que dio a conocer el documento, el diputado Mendoza aseguró que su postura no es discriminatoria, pues “no estoy en contra de eso ni me asusto tampoco”, sino que lo hace por las familias de Cuauhtémoc, que no saben cómo explicarles a los niños que ven a dos hombres besándose.
Dijo que en los recorridos que realiza casa por casa, ha recibido comentarios en el sentido de que en los próximos días se va a utilizar el arco de la entrada de la cabecera municipal para realizar otro matrimonio gay y que la gente no lo aprueba.
“Yo sólo soy la voz de los ciudadanos, ellos me dicen a mí que no están de acuerdo y yo tengo que escuchar sus voces”, justificó.
—¿Entonces su propuesta es hacer las bodas en lo oscurito? —preguntó un reportero.
—Efectivamente, se pueden hacer en la oficina del Registro Civil o algo más privado, o en su fiesta —respondió.
El diputado perredista remarcó que su propuesta de realizar las bodas en espacios cerrados sólo es para las que se realicen entre personas del mismo sexo, en tanto que “en los otros tipos de uniones, ahí no me meto, yo nomás en la cuestión ésta que apenas se está dando, que es algo nuevo para nuestro estado y nuestro municipio”.
A principios de marzo pasado, el pequeño municipio de Cuauhtémoc se convirtió en noticia internacional luego de que su alcaldesa, de 26 años de edad, autorizó el primer matrimonio entre personas del mismo sexo, pese a que no estaba considerado en las leyes estatales, pero lo hizo mediante una aplicación directa del derecho a la no discriminación establecido en la Constitución General de la República.
Tras una polémica generada en la entidad sobre la validez legal de esas uniones, en julio el Congreso del Estado aprobó el reconocimiento legal a las uniones del mismo sexo, pero las denominó “enlaces conyugales” y reservó el término “matrimonio” para las parejas heterosexuales.
Algunos sectores de la entidad, entre ellos la propia presidenta municipal de Cuauhtémoc, consideraron discriminatoria esta distinción y anunciaron una serie de amparos para tratar de obligar al Congreso a reconocer las parejas del mismo sexo como matrimonios.
Mientras los nueve municipios restantes apenas se preparan para celebrar “enlaces conyugales”, el de Cuauhtémoc ya ha celebrado hasta la fecha 28 matrimonios gay y su presidenta municipal declaró que hay alrededor de 20 parejas en lista de espera.
Inicialmente, el diputado Rafael Mendoza apoyó la postura del ayuntamiento de Cuauhtémoc, pero ahora aclaró: “Si yo tomé la decisión de apoyar la propuesta de la presidenta es porque no quería que hubiera conflictos entre nosotros y que estuviéramos chocando, por eso la apoyé, por no tener problemas con ella, pero Cuauhtémoc no está preparado para eso”.

Fuente Proceso